Utilización del CO2 en procesos de producción, una alternativa contra el cambio climático
Alrededor del mundo se están investigando diversas formas para combatir el cambio climático; en algunos países se busca la forma de reutilizar el CO2 en procesos de producción en lugar de simplemente capturarlo y almacenarlo en el subsuelo. El dióxido de carbono puede transformarse en un material de construcción extremadamente fuerte al hacerlo pasar a través de los desechos resultantes de la producción de acero; al inyectarlo en invernaderos puede acelerar la cosecha y al ser colocado en tanques de crecimiento de algas se puede utilizar en la producción de biocombustibles. Con el debido proceso del impieza, puede alcanzar un “grado alimenticio” y utilizarse en bebidas gaseosas. Sin embargo, estos procesos de aprovechamiento son raramente utilizados; cuando se requiere CO2 para un proceso industrial, éste se produce desde cero.
El profesor Peter Styring, de la Universidad de Sheffield, Inglaterra, quiere cambiar esta situación. Él cree que la captura y utilización de carbono (CCU, por sus siglas en inglés) puede ser una de las mejores maneras de combatir el cambio climático, al convertirlo en una parte integral de los procesos industriales. El científico británico considera que “hay posibilidades reales que apenas estamos comenzando a explorar”.
Hay algunos ejemplos del desarrollo de procesos para utilizar el CO2 de esta manera. Estados Unidos está invirtiendo mil millones de dólares en investigación de la CCU, incluyendo un proyecto en Standia Laboratories para hacer diesel sintético a partir del dióxido de carbono. El gobierno alemán ha destinado 118 millones de euros en un proyecto con Bayer, llamado “Dream Production Plan”, para investigar la utilización de este gas como materia prima. En Australia se está produciendo cemento con dióxido de carbono de las plantas de energía, y en muchos lugares del mundo se cultivan algas que absorben este gas y que son utilizadas para hacer biocombustibles.
Styring confía en que muchos de los usos potenciales para el dióxido de carbono podrían ser redituables con la inversión adecuada. El reporte titulado “Captura y utilización del carbono en la economía verde”, publicado por el Centro para el Futuro de Bajas Emisiones de Carbono (Centre for Low Carbon Futures) y del cual Styring es co autor, señala que investigadores de la Universidad de Newcastle, Inglaterra, desarrollaron catalizadores para la conversión de CO2 en carbonatos cíclicos altamente comercializables, los cuales puedes ser utilizados como electrolitos para baterías de litio; aditivos para diesel y combustible de aviación; en solventes; en la producción de policarbonados, poliuretanos y otros procesos químicos comerciales. El grupo calculó que una planta operando con este sistema, podría recuperar la inversión en menos de 2 años y generar ganancias de más de 1,4 millones de libras en 15 años, esta estimación fue realizada sobre los precios actuales de los carbonatos.
Muchos de los procesos previstos para la CCU requieren de la utilización de energía, pero los autores del reporte apuntan que ésta puede ser obtenidad de energías renovables, especialmente eólica y solar. Si bien los costos siguen siendo altos para muchos de estos usos potenciales, el reporte considera que se pueden abatir a través de la inversión y gravar con tasas altas las emisiones de carbono.Styring señala que, además de impulsar la investigación y desarrollo de estas teconologías, es necesario informar a los inversionistas del potencial beneficio económico de éstas.
Vía: The Guardian