Los tipos de generación de energía más limpios
Mark Z. Jacobson, del Departamento de Ingeniería Civil y Ambiental de la Universidad de Stanford, realizó un muy interesante estudio al revisar las posibles soluciones con respecto al uso de energía en cuanto al calentamiento global, la contaminación atmosférica y la seguridad energética.
El estudio realiza una comparativa entre doce tipos de combustible considerando su impacto en consumo de agua, uso de tierras, ecosistemas, disponibilidad de recursos, fiabilidad, contaminación térmica, contaminación del agua, proliferación nuclear y problemas de alimentos para el mundo. Además, los revisa en cuanto a su eficiencia con respecto a los tipos de motores para automóviles que se están desarrollando.
Los tipos de energía que acaban siendo los recomendados por el estudio son la energía eólica, la solar de concentración, la geotérmica, la maremotriz, la fotovolaíca, la hidroeléctrica y la undimotriz (generada por las olas).
Lo que más llama la atención es lo mal parados que quedan los llamados biocombustibles. El especialista los coloca como peor opción que, incluso, la energía nuclear y el coal-carbon (uso de carbón para producir energía eléctrica, pero capturando y almacenando el dióxido de carbono que produce). Esto no sólo por el hecho de que la producción de biocombustibles aumentaría los costos de la tierra, de los alimentos, y que por cultivarlos, se podrían perder grandes extensiones de selvas y bosques, también porque tomando en cuenta todo su ciclo de producción, desde el cultivo, transportación, fabricación, uso, etc., en algunos casos se acabaría produciendo más dióxido de carbono en comparación a las gasolinas, y en los otros casos la disminución no es significativa, inferior al 3 por ciento en condiciones optimas.
El autor hace un llamado al mundo a enfocarse a las verdaderas energías limpias y dejar de distraerse en las otras opciones como el coal-carbon, la energía nuclear y los biocombustibles. Hay suficientes recursos naturales para producir energía limpia en el mundo y el continuar dividiendo la atención sólo se retrasa la posible solución al calentamiento global.
Vía: Eco-Microsiervos