El éxito del TransMilenio bogotano es ejemplo para el resto del mundo
El New York Times presentó esta semana un extenso reportaje sobre los sistemas de transporte de autobuses confinados que se están desarrollando en las ciudades de los países en desarrollo. Ponen especial énfasis en el TransMilenio de Bogotá, por ser sin duda el proyecto más amplio y exitoso, sin embargo, también mencionan al Metrobús de la Ciudad de México.
El reportaje presenta a estos sistemas de transporte como la mejor apuesta para la ciudades de países en vías de desarrollo para ordenar el transito urbano, pero sobre todo, para que contribuyan en la lucha contra el calentamiento global y la contaminación. Poniéndolo en números, en el TransMilenio bogotano se realizan 1 millón 600 mil viajes al día en promedio, permitió a la ciudad sacar de circulación 7 mil microbuses y se redujo el consumo de combustible en un 59 por ciento desde su apertura en 2001.
Estos importantes aportes del TransMilenio permitieron que sea el único gran sistema de transporte urbano que ha sido aprobado por Naciones Únidas para generar y vender bonos de carbón, lo que ha implicado beneficios para Bogotá de entre 100 y 300 millones de dólares de acuerdo a especialistas. Actualmente, la Ciudad de México, está buscando que el Metrobús pueda ser aprobado también para el mercado de bonos de carbono.
En comparación con el metro, los sistemas de autobuses confinados, cuestan por kilómetro de construcción 30 veces menos, y durante su operación el costo de mantenimiento es 4 veces menor. Por ello es una opción ideal para la ciudades que no cuentan con amplios recursos.
El éxito del TransMilenio ha llevado a que ciudades a todo lo largo del planeta busquen implementar sistemas similares. En México ya contamos con dos líneas de Metrobús en la Ciudad de México y una de Macrobús en Guadalajara, y en el mundo, en Asia, África y América Latina se está implementando este sistema de transporte.