México haz algo

Hoy hablaremos de un lugar icónico de nuestra capital al que le tenemos gran cariño: Xochimilco.

Capitalinos, y visitantes de otros estados de la República, así como de otros países del mundo hemos disfrutado de los paseos en las chalupas con flores de colores, comiendo ricas quesadillas o tacos de barbacoa. Pero Xochimilco es muchísimo más que eso.

En 2004, el gobierno mexicano inscribió al Sistema Lacustre Ejidos Xochimilco y San Gregorio Atlapulco como humedal de importancia internacional bajo la Convención Ramsar. Además, la zona fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1987.

Xochimilco es un ecosistema remanente y único de la cuenca de México. Provee de agua a la Ciudad de México y es hábitat de especies endémicas como el ajolote y la rana de Moctezuma. Además, las chinampas (método de cultivo mesoamericano) y su paisaje, constituyen un sistema agrícola único en el mundo. El humedal proporciona servicios ambientales vitales para todos los habitantes de la ciudad, como ser un gran reservorio de diversidad, ayudar a controlar el clima, prevenir inundaciones y producir alimento.

Como hemos visto quienes habitamos en la Ciudad de México, el gobierno de la capital ha construido, a pesar de las protestas y acciones legales en contra, un puente vehicular cerca del humedal cuyas afectaciones ambientales ya pueden percibirse a simple vista.

Es por eso que el Colectivo Xochimilco Vivo, el Centro Mexicano de Derecho Ambiental, A.C. (CEMDA), la Coordinación de Pueblos, Barrios Originarios y Colonias de Xochimilco, así como habitantes de Xochimilco, Iztapalapa y Tláhuac, presentaron un amparo en contra de la obra.

El Juzgado de Distrito que recibió la demanda, determinó negar el amparo considerando que la Secretaría del Medio Ambiente de la Ciudad de México (Sedema) efectuó debidamente la Evaluación del Impacto Ambiental. Sin embargo, el proceso legal no ha terminado pues ahora se ha impugnado la sentencia y será un Tribunal Colegiado el que analice el caso.

Quienes presentaron el amparo señalan que los instrumentos legales en que se basó el gobierno de la Ciudad para otorgar su permiso no están contemplados en la Ley Ambiental de Protección a la Tierra en el Distrito Federal, ni en el Reglamento de Impacto Ambiental y Riesgo. Es así que el proyecto fue avalado por la Sedema sin contar con los elementos técnicos, científicos y jurídicos para evitar daños e impactos ambientales producidos por obras de este tipo.

Hemos comentado aquí la incongruencia en que caen nuestras autoridades cuando se refiere a los temas ambientales. El humedal de Xochimilco y su especie emblema, el ajolote, ilustran el nuevo billete de 50 pesos, el cual ganó un premio internacional al billete más bonito y ya es raro verlos en circulación pues todo mundo atesora uno, al punto de que ya es una pieza de colección por la cual se pagan hasta 400 pesos.

Tristemente, el ajolote se encuentra en peligro de extinción y el humedal de Xochimilco se sigue destruyendo por la contaminación de sus aguas y por las construcciones como el puente vehicular en cuestión. Nuevamente, los intereses económicos se sobreponen a la protección de nuestros ecosistemas más valiosos y al cuidado de nuestro patrimonio.

En México Haz Algo no hay esfuerzos pequeños y todos podemos ser parte de la solución. Súmate a las acciones de grupos como Xochimilco Vivo y #Yoprotejoelhumedal para detener la destrucción de una valiosa área natural protegida que se encuentra dentro de nuestra Ciudad de México.

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*Versión estenográfica cápsula del 15 de octubre de 2022 en Radio Fórmula.