CDMX aun conserva una gran variedad de fauna urbana: CONABIO

cascabelPese al proceso de urbanización que por años ha ocurrido en la Ciudad de México (CDMX), aún se preserva una gran variedad de fauna urbana, así lo dio a conocer Carlos Enrique Galindo Leal, director general de Comunicación de la Ciencia de la Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad (CONABIO).

Comentó que la fauna de la ciudad se clasifica en nativa y no nativa. La primera la integran animales que desde hace miles de años viven en el Valle de México, en áreas como Texcoco, Xochimilco y Chalco; y se divide en endémica y no endémica.

“Son especies endémicas aquellas que únicamente se localizan en áreas geográficas muy específicas. Por ejemplo, la tarántula del Pedregal de San Ángel no existe en ningún otro lugar del mundo”, destacó Galindo.

“En México hay alrededor de 40 o 50 especies de tarántulas, lo que ubica al país como el segundo con el mayor número de esta especie, después de Brasil”, añadió.

El directivo dijo que la fauna nativa no endémica radica en distintos lugares. Ejemplo de ello es el pájaro mirlo primavera, que se observa comúnmente en los parques de la CDMX, y que se distribuye desde Oaxaca hasta Canadá y por toda América.

En cuanto a la fauna no nativa, detalló que a ésta se le conoce como «exótica», la cual además de incluir a animales silvestres o domésticos introducidos en la región, considera a los seres humanos, pues por casi 30 mil años, han formado parte del entorno.

De la misma manera, la no nativa se clasifica en dos: la primera es exótica conformada por pollos, cerdos, vacas, borregos, chivos, camaleones, perros, gatos entre otros animales introducidos al país de forma accidental o intencional.

“En general se trata de animales que aun cuando provienen de otro lado, no representan ningún problema para otras especies, salvo cuando se les establece en islas”, refirió Galindo.

El especisalista indicó que al igual que el xoloitzcuintle, endémico de México, existieron otras razas de perros nativos que se extinguieron una vez que llegaron las nuevas castas.

Por otra parte, mencionó que la exótica invasora suele ser problemática para las especies nativas, ya que se convierten en plagas difíciles de controlar debido a su potencial reproductivo o de expansión.

Tal escenario propicia un desplazamiento de las especies nativas a través de la competencia, depredación, transmisión de enfermedades, entre otras interacciones, a la par de que dañan los ecosistemas, la agricultura, silvicultura, pesca o turismo.

Galindo Leal expuso que mediante la red social NaturaLista, sus cuatro mil miembros en México registraron siete mil 588 especies animales. De ellas, 928 fueron detectadas en la Ciudad de México e incluyen: 512 de insectos o arañas; 180 de mariposas y polillas; 17 de libélulas; 79 (la mayoría no venenosas) de alacranes y arañas; 18 de anfibios y 47 de reptiles.

Asimismo, hallaron cinco de serpientes de cascabel; 14 de colibríes; 37 de mamíferos, entre murciélagos, ratones, gato montés o lince rojo; comadrejas de cola larga y ardillas; entre otras.

Fuente: Notimex