Desarrollan proceso de nixtamalización sustentable que elimina la contaminación producida por agua residual

nixtamalizacion-2Expertos de la Universidad Autónoma Metropolitana, Unidad Iztapalapa (UAM-I), han desarrollado un proceso de nixtamalización capaz de eliminar la contaminación producida por el agua residual de dicho proceso, denominada nejayote.

La nixtamalización implica un método ancestral con más de siete mil años de antigüedad y consiste en colocar el maíz en agua con cal para después cocerlo durante un lapso de entre 15 y 30 minutos.

Al término del proceso, el maíz se deja en reposo a temperatura ambiente, lo cual permite la obtención del nixtamal. Posteriormente, este se coloca en el molino de nixtamalización a fin de obtener la masa para hacer tortillas; con ello, el desecho del nejayote se va al desagüe sin ningún tratamiento previo.

Esta última etapa representa una fuente importante de contaminación, pues el nejayote se elimina con un elemento alcalino a una temperatura de entre 40 y 50 centígrados, además de que presenta una gran número de sólidos disueltos.

Gerardo Ramírez Romero, líder del proyecto, dio a conocer en entrevista que evaluaron distintos procesos de tratamiento del nejayote con el objetivo de disminuir la contaminación que produce.

“Por ejemplo el de digestión anaerobia, que es uno de los procesos más comunes para el tratamiento de aguas residuales; sin embargo, este provoca olores desagradables debido a la etapa de fermentación, por lo que se vuelve un procedimiento poco recomendable para instalarse en un molino de nixtamalización”, señaló el especialista.

También mencionó que desde hace casi una década un equipo de científicos planteó la idea de un proceso para remover el nejayote en su totalidad. Sin embargo, la opinión de los molineros en cuanto a esta alternativa recibió respuestas negativas.

“Aprendí que la nixtamalización es una tecnología madura que no iba a cambiar, así que me uní al enemigo”, expuso el académico de la UAM.

Refirió que lo primero que hicieron fue modificar y trabajar con el agua, pero los molineros no deseaban realizar cambios en este aspecto ya que no era algo que amenazara su negocio y, por ende, les pareció poco relevante. Esta fue la causa por la que el equipo de la UAM puso en marcha los trabajos para desarrollar un molino sustentable, que permitió modificar el proceso de nixtamalización.

Primero, se realizó a menor temperatura y después se reutilizó el nejayote, facilitando así la disminución de los costos de producción, lo que comenzó a interesarle a los dueños de los molinos de nixtamalización, apuntó Ramírez Romero.

“Al decantar el nejayote descubrimos que los floculantes químicos y orgánicos no funcionaron porque existía una fuerte relación entre la cal, el agua y el almidón del maíz que evitaba su precipitación. Y ¿Cómo logramos romper esta relación?, a través de una carga eléctrica, lo que se llama electrofloculación”, subrayó.

El investigador sostuvo que como resultado lograron obtener agua limpia, la cual puede aprovecharse para la molienda, el lavado y la transportación del maíz, lo que reduce el consumo de agua hasta en un 50 por ciento. Asimismo, fue posible diminuir el consumo de energía térmica (en 80 por ciento) gracias al cocimiento de maíz a menos temperatura.

Aunado a esto, se potenció el rendimiento del producto final en cinco por ciento y se redujo la turbidez del agua residual en 99.6 por ciento, lo que permite proteger el medio ambiente.

“Hace seis meses comenzamos un proyecto que tiene por objetivo instalar diez molinos sustentables en diez molinos de nixtamalización, el cual es financiado por el Fondo Sectorial de Innovación de la Secretaría de Economía (SE) y el CONACYT”, aseveró.

“Aquí vamos a transformar los molinos y demostrar cómo funciona el nuevo sistema del molino sustentable”, añadió el científico.

Ramírez Romero destacó que la estructura administrativa de muchos molinos de nixtamalización les sirvió de aliada para aumentar la participación de los molineros en dicho proyecto.

“Aunque son pocos los que se animan por el riesgo a invertir en un sistema de este tipo, una vez que los diez molinos sustentables comiencen a funcionar se volverá un éxito y será exponencial la implementación de esta tecnología”, concluyó el especialista.

 

Fuente: Crónica